domingo, 17 de agosto de 2008

Taberna


Es un lugar peligroso, de mala muerte, un lugar sin ley.... una taberna en un lugar prohivido para cualquier persona con sentido comun. Un refugio para los proscriptos, bandidos, dementes y cualquier marginado por el mundo. En este lugar los policias hacen tratos oscuros con bandidos y los escritores tienen el lugar perfecto para sus novelas negras; aqui el vicio y la muerte se conjugan de manera tal que su atractivo es tan seductor que te dejas llevar y si no te cuidas terminaras como todos aqui.

Aqui los hombres ganan y mueren en la ruleta rusa, beben para olvidar y para recordar viejos amores; las mujeres son diosas mandan en este lugar aunque digamos que no.

Aqui un tipo sentado en la barra, ve a una hermosa dama de estilo sutil, con el toque de un angel. El un mujeriego enpedernido, sin limites y sin moral. El se le aserco y entrelazandole el brazo en torno a su cuello, mientras miraba directamente a los ojos negros de aquellas mujer, solo le dedico un beso, ella respondio de agual manera. Mientras que la mesa sujetaba su cuerpo de reina, una botella de vino, una copa, y despues de un rato ya no estaba ni la mujer de cuerpo de reina ni la botella ni la copa solo queda la mezcla del perfume de ella con la esencia del este sitio, con el alma de este ambiente. Asi es este lugar, donde las cosas suceden de manera rapida, sutil, natural y sin remordimiento.

Un expresidiario se preocupa por no tener a donde ir por culpa de su actuar; mientras que una mujer esta anciosa por tener suerte esta noche, separada y despechada, se que no terminara bien; un tipo de buena apariencia oculta que lo ha perdido todo y que depende de esta ultima mano de poker; mientras que afuera en el callejon, entre el humo de los cigarrillos, la neblina propia de la noche y la luz parpadeante de un poste, empiezan a aparecer prostitutas, ladrones y toda clace de personas unicas en su especie. La calle se vuelve peligrosa de un momento a otro. Aunque dentro de este lugar en tiempo no existe. Afuera pareciera que el tiempo corre mas rapido que de costumbre.

Aqui el peligro se puede sentir en el aire, y el olor del alcohol se mezcla con el humo del ambiente. No me atrevi a preguntar que era aquel olor pero no era necesario saberlo. Asi que me dirigi a la barra y pedi un vodka, mientras mirava a la chica del pelo oscuro, soberbia mirada y un vestido que encandilaria a un ciego. Me hacerco a ella y me regala una mirada, la invito un guisqui y nos ponemos a conversar sobre la vida y un millon de cosas sin importancia. La noche pasa rapidamente entre risas, besos y caricias. Jamas me dijo su nombre ni yo le dije el mio. Se que jamas la boi a volver a ver, y sin embargo estoy seguro de que no la olvidare. Las cosas se dieron igual que todo en este lugar, de manera rapida, sutil, natural y sin remordimientos. Tal y como todas las noches de este lugar, igual que siempre en esta taberna de marginados, como siempre en este lugar sin nombre y sin ley.

Lobo

1 comentario:

AnĂ³nimo dijo...

pudiese ser yo la dama de estilo sutil y ojos negros? te mando muchos saludos desde el norte del pais... nos estaremos leyendo y terminando nuestro "cadaver esquisito" cuidate...

Dasvidanya!

Gato